Jaulas de Libertad
Enterrado… Sofocado en esta guerra de ideales corruptos, En medio de balas perdidas, gritos silenciosos, miradas contristadas... Solo, entre mares de corazones desconocidos… Atado por ocho horas diarias Entre paredes de concreto, ordenes absurdas, Entre barrotes forjados con la necesidad solo veo calles llenas de luces verdes, amarillas, rojas…, Letreros incandescentes, sonidos desagradables. Perseguido por papeles, números gigantes, emblemas corporativos. De vez en cuando me visita la impotencia, acompañada por en el miedo absurdo de encender la luz. Pero llegado el día, salgo en busca de jaulas, Cárceles donde encuentro libertad… Ahogando las penas, borrando por pocos minutos lo que la vida ha grabado por años, Donde pasadas algunas horas, ya no importa mi nombre, No importan los mares sofocantes, los desiertos por los que transita mi alma, Ya no importa nada…, Al menos, no hasta el día siguiente…